Cultura
hablaron en vivo en Facebook y acusaron a los gobiernos previos de convertir a la secretaría de 300.0000 empleados en una fábrica de militantes. Ambos anunciaron que habrá una limpieza profunda de los libros de texto.Todavía hay algunos (libros) que no nos gustan, pero mucha mugre ya ha salido, Weintraub le aseguró a Bolsonaro.Para Claudia Costin, una exsecretaria de Educación en Rio de Janeiro y exdirectora de educación en el Banco Mundial, la guerra cultural es una pérdida de tiempo valioso. Brasil estuvo en el tercio más bajo de los 79 países que participaron en 2018 en el Programa Internacional de Evaluación de los Alumnos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). De acuerdo con los resultados de la prueba, los estudiantes brasileños no han tenido avances en matemáticas, lectura y ciencia. Y las escuelas públicas han tenido resultados especialmente bajos.Tenemos mucho trabajo por hacer, dijo Costin. Todo esto es una distracción de lo que realmente se necesita hacer.___El periodista de The Associated Press Marcelo de Sousa, el videógrafo Lucas Dumphreys y el fotógrafo Eraldo Peres contribuyeron a este despacho.
Fuente: 20 minutos